En la sesión de este miércoles, los diputados de la
provincia dieron sanción definitiva al proyecto del Poder Ejecutivo que declara
la emergencia educativa en la provincia.
La iniciativa, que la semana pasada había sido aprobada por
el Senado, tiene dos ejes: que se autorice la realización de compras directas
por vía de excepción para atender las urgencias edilicias de los
establecimientos educativos para el normal inicio del ciclo lectivo y que se
refuerce el plan de alfabetización en lecto-escritura en el primer ciclo del
nivel primario.
Al respecto, la diputada Susana Pérez (Juntos por Entre
Ríos) sostuvo que “es necesario actuar de manera urgente” para afrontar una
situación que se viene arrastrando hace mucho tiempo: “El sistema educativo no
permite que los gurises enfrenten su futuro de manera óptima”, lamentó.
“Hoy es el día de dar la cara y mostrar que las escuelas
están desbastadas en el aspecto edilicio, administrativo y tecnológico”,
subrayó.
Por su parte, la diputada Laura Sratta (PJ) resaltó que
“desde nuestro bloque asumimos que la educación es prioritaria para fortalecer
un proyecto de provincia”, aunque lamentó el “tratamiento express” del proyecto
y sostuvo que a su bloque le hubiese interesado “realizar aportes”.
En tal sentido, marcó “algunas preocupaciones” sobre el
proyecto, entre ellas, que “no se conoce cuál es el Plan de
Alfabetización”. Tras aseverar que “ese
tipo de planes se construyen colectivamente”, aseveró que acompañan la
iniciativa porque son “una oposición constructiva”.
“Entendemos que todas las acciones dirigidas a mejorar la
educación son urgentes”, pero recordó que durante muchos años en la provincia
se implementó un plan de reparaciones menores de edificios escolares denominado
Plan Verano: “Ese plan se llevaba a cabo todos los años y empezaba a mediados
de diciembre, cuando los gurises estaban de vacaciones. Se reparaban entre 250
y 300 escuelas por año. Hubiera sido una buena oportunidad para poder
sostenerlo, ya que permitió hacer las reparaciones pertinentes en tiempo y
forma durante mucho tiempo”, indicó.
También se expresó la conveniencia de conocer el listado de
las escuelas a reparar, como ocurría con el Plan Verano. “Antes había programas
que establecían un criterio; que establecían montos, plazos y el modo de
intervenir. Ahora aparece este proyecto de ley, con otros criterios, y un
sistema de contratación directa”, añadió la titular del bloque antes de la
votación.
La radical Gabriela Lena recogió el guante y señaló que la
situación financiera de la provincia es complicada e hizo foco en las
dificultades que representa el cambio de gestión a nivel provincial y nacional,
entre otras cuestiones.
Luego la diputada Gladys Salinas (Partido Conservador
Popular) hizo mención al “increíble deterioro de las escuelas” y Roque Fleitas
(La Libertad Avanza) anunció el acompañamiento del proyecto, aunque manifestó
su desacuerdo “con las formas”, ya que hubiese tenido que abordarse en
comisión.
Más tarde, Lorena Arrozogaray (PJ) marcó las grandes
diferencias entre Néstor Kirchner y Javier Milei, “uno garantizando el inicio
de clases, el otro recortando recursos para la educación” y estableció su
preocupación por la situación de la educación de jóvenes y adultos.
Luego la diputada Julia Callereos Arrecous (Fe y Libertad)
manifestó su inquietud por el estado de las escuelas rurales e instó a “unirnos
en esta patriada por la educación”.
Por su parte, Juan José Bahillo (PJ) sostuvo que la ley de
emergencia tiene que ver con un proceso
de transición, que incluso siendo entre gestiones del mismo signo político,
siempre es engorroso. Tras una respuesta de Fleitas, el diputado provincial
Fabián Rogel (UCR) sostuvo: “Tratemos de cerrar la grieta e ir para adelante,
aunque mirando el espejo retrovisor”, mientras que Enrique Cresto (PJ) hizo
referencia a lo hecho en materia de obras públicas en las anteriores gestiones.
Diario La Paz